Randall Flagg, el Hombre Oscuro

Como bien sabe cualquier lector de Stephen King, Randall Flagg es el Mal, con mayúsculas. Sin embargo, para quienes lo hayan conocido a través de la saga de la Torre Oscura y, en particular, a través de su fallida adaptación cinematográfica, tal vez ignoren que Flagg es uno de los personajes más antiguos del escritor de Maine, que aparece de forma recurrente en su obra y que, en cierto modo, sirve de nexo entre diferentes poemas, relatos y novelas, hasta convertirse en una de las piezas clave de ese Multiverso (con perdón de Michael Moorcock) que King empezó a construir en algunas de sus primeras obras (como Apocalipsis o La niebla) y que cobra carta oficial a partir de la publicación de Lobos del Calla (2003). Pero no nos anticipemos. Es 1974 y un joven aspirante a escritor llamado Stephen King ha conseguido sacar al mercado su primer libro, Carrie, una angustiosa historia sobre una adolescente reprimida que usa sus poderes paranormales para vengarse de todos los que la han maltratado o humillado a lo largo de su corta vida.

“El hombre de negro huía a través del desierto, y el pistolero iba tras él”.

En realidad, a principios de los setenta, King tenía varías historias total o parcialmente escritas y listas para publicar. Carrie fue la primera, a la que le siguieron El misterio de Salem’s Lot (1975), El resplandor (1977), Rabia (1977, publicada como Richard Bachman) y La danza de la muerte (1978), versión abreviada de Apocalipsis, que no vería la luz como tal hasta 1990. En La danza de la muerte, una versión letal del virus de la gripe que se ha escapado de un laboratorio militar ha exterminado al 99,9% de la humanidad. Los escasos supervivientes se agrupan en dos bandos: uno, el que se forma en torno a la madre Abigail (que representa, a grandes rasgos, el bien, a la manera de uno de los profetas del Antiguo Testamento) y otro liderado por Randall Flagg, alias el Hombre Oscuro. La encarnación física del mal y de los peores instintos de la humanidad.

Desde el principio, Flagg se nos presenta como un misterio. La primera vez que lo vemos vaga por el desierto. No recuerda bien su origen o de donde ha salido. Tiene una aspecto normal, casi vulgar, vestido con botas y ropa vaquera adornada con numerosos pins. Pero está claro que es un mago, o que tiene alguna clase de talento. Puede transmutar objetos o hacerlos aparecer de la nada. Es capaz de leer la mente de las personas incluso a cierta distancia y, como el conde Drácula, posee control sobre algunos animales, como los lobos o los cuervos. Pero no es infalible: Tom Cullen escapa a su radar, su "prometida" se suicida llevándose consigo a su primogénito nonato, y su propia mascota, el Basurero, se convierte al final en la herramienta de su fracaso. Es curioso que, en cierto modo, Flagg representa la fe en la ciencia y la tecnología, frente al fanatismo religioso de la madre Abigail. ¿Está insinuando King aquí una cierta crítica antitecnológica, al estilo de La tierra permanece de George R. Stewart, novela con la que Apocalipsis tiene no pocos puntos en común?

Curiosamente, Apocalipsis no es el debut oficial de Flagg, aunque parezca lo contrario. La idea del “Hombre Oscuro” llevaba rondando por la cabeza de King desde sus años universitarios. De hecho, ya en 1969 había escrito un poema con ese título, justo antes de escribir las míticas palabras que dan comienzo a “El pistolero” (1970), primero de los cinco relatos que forman la primera entrega de La torre oscura (1982): “El hombre de negro huía a través del desierto, y el pistolero iba tras él”. Así que cuando King publicó La danza de la muerte (1978), versión primeriza de Apocalipsis, se puede decir que la figura de Flagg ya estaba presente, de alguna manera, en su obra, como símbolo del Mal y de la ambición de poder desmedido, algo que reaparecerá en su encarnación de la saga sobre la Torre Oscura. Pero ¿quién es realmente Randall Flagg y cuál es su auténtico origen?

King dio parcialmente respuesta a estas preguntas en su novela Los ojos del Dragón (1984), una especie de cuento de hadas fantástico en la que Flagg es un aprendiz de mago que encarna al adversario de los protagonistas y, una vez más, se nos muestra como un agente al servicio del mal. Hoy sabemos que esta es la primera aparición oficial de Flagg, ya que el escenario de la novela corresponde al universo de la Torre Oscura, aunque no está claro cómo llegó a nuestra tierra a tiempo de participar en los eventos de Apocalipsis, salvo que aceptemos que por aquel entonces King ya estaba empezando a desarrollar ese incipiente Multiverso que conecta toda su obra, y que cobra carta oficial en La llegada de los Tres (1987), segunda entrega de la Torre Oscura y, en especial, en la quinta entrega, Lobos del Calla (2003). Como tal, Flagg sería un agente del caos, la encarnación del Mal en ese Multiverso creado por Stephen King que conecta sutilmente la mayoría de sus obras y da a entender que la torre es el punto de acceso a infinitos universos. Sin embargo, ¿qué fue de Flagg entre su primera aparición en Los ojos del Dragón y su regreso como némesis personal de Roland Deschain? Ahí entra en juego La danza de la Muerte, un mundo alternativo al nuestro en el que – como ya decíamos - una pandemia fuera de control llamada el Capitán Trotamundos ha exterminado al 99,9% de la población mundial. La primera edición de la novela era una versión resumida y abreviada (pese a su extensión), por lo que en 1990 King decidió recuperar el título y el texto originales, que incluían un nuevo prólogo y, sobre todo, un epílogo inédito en el que Flagg se despierta de nuevo en el desierto tras su aparente destrucción, revelándose así como mucho más que humano. De hecho, varios personajes con las iniciales R. F. aparecen en diferentes novelas y relatos de King (como Corazones en la Atlántida) lo que podría indicar que Flagg tiene diversas encarnaciones o que, al igual que Roland y su Ka-tet, puede moverse a lo largo y ancho de ese Multiverso que conecta la Torre. A título anecdótico, en 1994 se rodó una primera versión televisiva de The Stand, en la que Flagg estaba interpretado por el actor Jamey Sheridan.

Apocalipsis aparte, el gran papel de Randall Flagg es el de adversario de Roland de Gilead en la saga de La torre oscura. Los motivos de esa enemistad es algo que se nos va revelando poco a poco, sobre todo en el cuarto volumen de la serie (Mago y cristal, 1997), aunque ya desde el principio se nos dan algunas pistas. Al igual que Grima, lengua de serpiente, Flagg es el consejero del padre de Roland (un rol similar al que representa en Los ojos del Dragón). El villano provoca a Roland para que realice su iniciación de pistolero de forma prematura (con el consiguiente riesgo de fracasar), pero al frustrarse su objetivo recurre a su plan B: seducir a la madre de Roland y convencerla para que asesine a su padre. A lo largo de los ocho volúmenes que dura la serie Flagg utiliza muchos alias y pseudónimos, aunque el del Hombre Oscuro o el Hombre de Negro es uno de los más recurrentes. Sin embargo, no tiene nada que ver con John Farson, el llamado “Hombre bueno”, salvo el hecho de ser aliados en su objetivo de derrotar a la baronía de Gilead y de hacerse con el control del mundo Medio. Aparentemente, Flagg sirve al Rey Carmesí, aunque tiene sus propios planes y en el último libro de la saga se revela como el gran competidor de Roland por el poder de la torre oscura.

Sin embargo, La torre oscura es una historia cíclica, lo que quiere decir que al igual que Roland se despierta para empezar de nuevo (“El hombre de negro huía a través del desierto, y el pistolero iba tras él”), también Flagg puede haber sobrevivido y seguir atrapado en ese círculo sin principio ni final, tal y como ocurría en Apocalipsis.

La película La torre oscura (2017), en la que Idris Elba interpreta a Roland, mientras que el papel de Flagg (o Walter O’Dim) recae sobre Matthew McConaughey, nos da algunas pistas más sobre el carácter del villano y sus capacidades. Conaughey compone un Flagg arrogante, ambicioso, y extrañamente seductor en su villanía. Como adaptación de la serie, la película es un fracaso absoluto. Está demasiado resumida, faltan demasiadas escenas y personajes clave y sólo pueden entenderla (en parte) quienes se hayan leído todos los libros antes de ir al cine. Algunos opinan que, de hecho, la película es la secuela de la saga, la siguiente iteración de Roland tras alcanzar la torre oscura, y que por eso no tiene que ser necesariamente igual que las novelas, al igual que la adaptación al comic de Marvel difiere en algunos puntos de la historia que conocíamos a través de las sucesivas ediciones de la serie.

Y ya que hablamos de Marvel, la colección de comics arrancó en 2007, con guiones de Peter David y Robin Furth, mientras que el apartado gráfico corría a cargo del infravalorado (y, sin embargo, talentoso) artista Jae Lee. La primera mitad de la serie se concibe como un gran flashback donde se narran los hechos que Roland va rememorando a lo largo de la saga, como su relación con Susan delgado y la caída de Gilead. A partir de cierto punto la serie de comic alcanza a su fuente de inspiración literaria y comienza a adaptar la primera entrega hasta la conclusión de esta.

Conviene señalar que algunos lectores advierten inconsistencias entre las novelas y esta versión en cómic, que Furth atribuye a que puede ser una historia alternativa de las muchas que existen en el Haz, al igual que ocurre con la versión cinematográfica. En cualquier caso, el comic nos sirve para conocer un poco más la figura de Flagg y sus planes, además de otros personajes que apenas se mencionan en las novelas, como el propio John Farson, que luce una estética aterradora en la versión de Lee, mientras que Flagg tiene un aspecto casi oriental, con barba y una melena que recuerda a la de su versión televisiva.

Curiosamente, The Stand es una de las pocas obras de King que ha conocido un segunda versión televisiva, aunque en esta ocasión la historia se expande mucho más, hasta alcanzar las dos temporadas (2020-2021), una profundidad que permite adaptar la novela con más detallismo, mientras que en esta ocasión el papel de Flagg recae en el actor sueco Alexander Skarsgård, que, si bien no logra hacernos olvidar a McConaughey, tiene mucho más tiempo para desarrollar al personaje y su personalidad, dándole un profundidad de la que carecía en la versión anterior.

Por lo demás, muchas cosas alrededor de Flagg continúan siendo un misterio, pero, al igual que ocurre con otros célebres villanos del comic, el cine y la TV, a Flagg el misterio le sienta bien. De hecho, saberlo todo sobre él podría arruinar buena parte de esa aureola de magia e impredecibilidad que rodean al personaje, y reducirlo a otro ser humano con sus escasas virtudes, sus muchos defectos y una ambición desmedida. El propio King parece sentirlo así, ya que apenas ha utilizado al personaje en sus últimas novelas, mientras que el proyecto para llevar de nuevo a la pantalla su épica saga literaria continúa (de momento) estancado. Entretanto, siempre podemos releer Apocalipsis o la saga de la Torre Oscura para deleitarnos con las intrigas de uno de los villanos más interesantes y carismáticos de las últimas décadas, digno heredero de Mordred, el Dr. Fu Manchú o Ernst Stavro Blofeld.

- Bibliografía & filmografía:

- «El hombre oscuro» (1969). Poema.

- «El pistolero» (1970). Primero de los cinco relatos que formaron la primera entrega de la Torre Oscura.

- La torre oscura: el pistolero (cinco historias escritas entre 1978 y 1981; publicadas como novela en 1982).

- La danza de la muerte (1978). Versión original, abreviada y resumida.

- Los ojos del dragón (1984). Novela. Segunda aparición oficial de Flagg.

- Apocalipsis (1990). Versión completa y revisada de la obra. Además de agregar y revisar algunas secciones, el autor cambió la ambientación de la historia de 1980 a 1990, y puso al corriente varias de las referencias a la cultura pop. Además, la nueva versión contó con ilustraciones de Berni Wrightson. La parte relativa a Flagg no varía sensiblemente, salvo por la adición de un nuevo epílogo en el que se revela que el villano ha sobrevivido a la destrucción de Las Vegas.

- Apocalipsis (1994). Serie de TV. Primera adaptación de la novela, con Jamey Sheridan en el papel de Randall Flagg.

- La torre oscura: Mago y cristal (1997). Cuarta entrega de la saga, donde se proporciona información acerca del pasado de Roland y la génesis de su enfrentamiento con Flagg. Señalar que la novela se publicó originalmente como La bola de cristal, hasta que se retocó para que fuese más congruente con el final de la serie.

- La torre oscura: el pistolero (2003). Versión revisada de la novela original. Esta nueva versión cuenta con modificaciones en el lenguaje, además de nuevas y cambiadas escenas que pretenden resolver inconsistencias que se presentaron con los libros posteriores de la serie.

- La Torre Oscura (2004). Volumen final de la serie, donde se resuelve el largo enfrentamiento entre Roland y Flagg.

- The Dark Tower (2007). Serie de cómics publicada por editorial Marvel, escrita por Peter David y Robin Furth, que arranca como precuela de la saga, desarrollando los flashbacks que aparecían en las cuatro primeras novelas y revelando así la historia previa a los hechos de «El pistolero» hasta que entronca con la primera entrega. A partir de ahí la serie de cómic continuaría, ya adaptando las novelas originales de la saga.

- Apocalipsis (2008-2012). Serie de cómics publicada por la editorial Marvel, que adaptaba la historia original de King a partir de la versión sin censurar de 1990. En España se publicó en 2011.

- La Torre Oscura (2017). Adaptación cinematográfica (y muy libre) de la saga, con Idris Elba en el papel de Roland Deschain, y Matthew McConaguey como Randall Flagg. Se considera que es una secuela de la saga original, en la que se narra la siguiente aventura de Roland tras acceder a la torre en 2004.

- The Stand (2020-2021). Segunda adaptación televisiva de la obra clásica de Stephen King, en esta ocasión con Alexander Skarsgård en el rol de Randall Flagg.